Mudar a otro país no es fácil. La adaptación a una nueva cultura, la alimentación y el estilo de vida por lo general requieren paciencia, flexibilidad e inversión. Y una de las principales dificultades en este proceso son los recursos financieros. Para aquellos que piensan vivir en Europa, tanto por algunos meses o permanente, la inversión desde su país y en los primeros meses en el nuevo país, son sin duda las cuotas que pesan más en el bolsillo. Para ahorrar dinero, es importante saber sobre el país de destino y adoptar algunas prácticas simples pueden ayudar.
- Una comunicación eficaz: muchos estudiantes que llegan a Europa vienen con el propósito de aprender el idioma Inglés. En este caso, la posibilidad de ahorrar es otra razón de peso para el estudiante de intercambio esforzarse aún más en su aprendizaje, para que pueda comunicarse con fluidez. Los residentes locales conocen la ciudad como nadie y pueden dar consejos sobre los lugares más baratos para comprar, por ejemplo. Lo que nos lleva al nuestro segundo consejo…
- Interactuar y crear un círculo de contactos: sean amigos compatriotas o europeos, siempre habrá alguien que conoce el lugar más barato o descuento en una tienda. Además de ser mucho más divertido, estar con los amigos puede ser una gran diferencia económica (al momento de pagar la factura).
- Compartir un hogar: el alojamiento es uno de los factores que pesan en el bolsillo del estudiante de intercambio, pero la mayoría de las ciudades ofrecen opciones para que los estudiantes puedan compartir apartamentos o habitaciones. Por lo tanto, los valores son mucho más asequibles.
- Olvidar el coche: la mayoría de las ciudades europeas tienen un transporte público eficiente y muchos de los estudiantes pueden usarlo para resolver todo lo necesario, incluso a pie. Además, Europa tiene diferentes opciones de transporte (accesible) de una ciudad a otra. Si el estudiante de intercambio elige ir por el aire, vale la pena mantener un ojo en las promociones de las compañías de bajo coste, ya que es posible conseguir vuelos desde £ 2,99 .
- Comer por menos: muchos restaurantes ofrecen descuentos para estudiantes, la mayoría de los establecimientos tienen promociones diarias y grandes supermercados europeos suelen hacer una gran cantidad de ofertas como “3 unidades por £ 5” o “lleva 2 y pagas 1” La mayoría de ellas realmente vale la pena, por lo que es importante estar al tanto.
- Tome ventaja de las atracciones gratuitas: tener poco dinero no es excusa para quedarse en casa. Además de aprovechar parques abiertos y atractivos gratis para el público, cada ciudad europea por lo general tienen un día en el mes que no se cobra la entrada a museos y otros sitios famosos. En Irlanda, por ejemplo, cada primer miércoles del mes 43 monumentos históricos están abiertos libre para los visitantes. En el país, la mayoría de los pubs no cobra entrada. Por lo tanto, si quieres disfrutar de buena música en un ambiente animado no tiene que pagar nada a cambio!
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